viernes, 4 de febrero de 2011

el amante


Seducido por un rio besos
la carne se amotina,
culpas crepusculares
antídotos contra la monotonía.
A él le regalo una corona
que solo pesa en el orgullo,
ella me respira…
y gana un mundo a parte
donde cobijar sus desengaños.
Mentiras que ocultan
duras realidades,
deseos que transforman
grises cotidianos.
Soy el que se esconde
tras los mensajes ocultos,
la imagen proyectada
que subyace en la promesa

6 comentarios:

  1. amigo después de leerte quedé con la carne amotinada, desafiando los grises, aunque no haya promesas. Me gusta, un beso

    ResponderEliminar
  2. a mi me ha recordado una canción de Serrat, (ya sabes lo que me gusta) http://open.spotify.com/track/7r0Uc4YIFfwxTDkmkdeHOI

    ResponderEliminar
  3. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
  4. hay que saber amar los grises. Y hay que ser muy constante para conseguirlo. un beso.

    ResponderEliminar